Percusión, cantante, mandos de la Wii y electroacústica.
Escrita para un percusionista, una soprano, una bailarina, mandos de la Wii y electroacústica. La obra cuenta con imágenes creadas por Belén Ceñal. A lo largo de la pieza las diferentes artes interactúan entre sí generando un conjunto harmónico y de vanguardia.